Carta a la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo
Fotografía | Agencia EFE
Tras la lectura de la comunicación de la Comisión al Parlamento europeo y al Consejo bajo el título “Hacia una Pesca más Sostenible en la UE: Situación Actual y Orientaciones para 2022” (COM 2021 279 final), observamos que la Comisión en este informe indica, para el Mediterráneo:
- Que llevamos dos años 2020/2021 de implantación del plan plurianual (MAP WestMed) y como la propia CE reconoce, hasta 2022 no dispondremos de la evaluación de las medidas adoptadas:
o Régimen de Esfuerzo Pesquero
o Vedas Espacio-Temporales
o Selectividad del Arte
- Los indicadores de seguimiento abarcan el periodo comprendido HASTA 2018.
- Durante los dos primeros años de ejecución del MAP WestMed, se ha hecho una reducción de esfuerzo del 17.5%
- LA CE aspira a seguir reduciendo los esfuerzos pesqueros conforme a los dictámenes científicos al objeto de alcanzar el RMS en 2025
- En el Mar Mediterráneo la biomasa lleva creciendo desde 2015 y, por contra, los indicadores de mortalidad por pesca han descendido.
- Como consecuencia de distintos factores, entre ellos la pandemia por Covid-19, el rendimiento económico de la flota de la UE ha disminuido en 2020 en un 29% del rendimiento neto, y un 19% en empleo a pesar de haberse establecido ayudas a través del FEMP para paliar estas consecuencias.
- Aunque el CCTEP publicara su dictamen científico sobre el Mediterráneo en otoño 2021 ya la Comisión en su comunicación insiste en que se han de proseguir los esfuerzos de conservación.
- Por ello, la propuesta de reglamento sobre las posibilidades de pesca que propondrá la Comisión tendrá por objeto seguir aplicando estrictamente el plan plurianual, con nuevas reducciones para alcanzar el RMS en enero de 2025.
Ante estos planteamientos de la Comisión Europea, el sector pesquero se reafirma en su frustración por el desconocimiento que la misma tiene sobre la realidad de la actividad pesquera en el Mediterráneo y más concretamente en la zona Occidental; se evidencia que siguen muy alejados de las necesidades y la realidad del sector y por ello apelamos a ese Parlamento europeo para que desde su responsabilidad política haga girar el rumbo de la aplicación de la PPC actual en el Mediterráneo, escuchen al sector, conozcan la realidad de la pesca de arrastre en el Mediterráneo occidental, y eviten el colapso de la actividad pesquera de la que dependen directamente nuestras comunidades.
Son numerosas las voces de expertos, incluso no vinculados a la pesca, que ya plantean abiertamente grandes dudas sobre la eficacia de la aplicación actual del MAP de demersales WestMed: resaltamos como la comunidad científica pone en duda la relación directa entre reducción de esfuerzo pesquero y reducción de la mortalidad. El plan plurianual solo tiene una base sólida sobre el impacto medioambiental y se ha dejado atrás el impacto social y el económico que también deberían ser preceptivos siguiendo los principios la PPC.
De nuevo ponemos encima de la mesa de discusión de tener en cuenta otros factores ajenos a la pesca, pero que están afectando directamente a los stocks pesqueros y que en ningún momento la Comisión tiene en cuenta, entre los que destacamos: los efectos del cambio climático, impacto de especies invasoras, las distintas actuaciones industriales en los fondos marinos, el intenso tráfico marítimo en la zona, etc.
El propio CCTEP reconoce la imposibilidad de alcanzar el RMS en 2025 incluso con las medidas tan asfixiantes que se imponen al sector. Ante esto, el propio sector pesquero se pregunta:
1. Sin datos científicos actualizados, sin la valoración de la aplicación de las medidas del MAP WestMEd llevadas a cabo en 2020 y 2021, ¿Cómo puede la Comisión seguir insistiendo en la necesidad de más reducción de esfuerzo pesquero? Ni siquiera saben que esté funcionando en el ecosistema, en cambio, sí se sabe del impacto negativo en los pescadores…Para el sector español, la realidad de reducción de días de pesca no es como manifiesta la Comisión, de un 17.5%, sino que ya se ha constatado un 29%, y eso sin tener en cuenta los 13800 días de no-pesca debido a la pandemia por Covid-19 que la flota española no ha usado en el año 2020.
2. Cuando se habla de una respuesta rápida y eficaz en la aprobación de ayudas del FEMP para contrarrestar los efectos de la pandemia, hay una gran divergencia ya que desde el punto de vista político-administrativo tal vez ha sido rápido y eficaz, pero la realidad en los puertos es que, a día de hoy, el 75% de las ayudas Covid-19 aún no han llegado a los pescadores.
3. No entendemos que, si el CCTEP va a hacer público su dictamen científico sobre el Mediterráneo en otoño, la Comisión, que debe basar sus propuestas sobre la base científica, se adelante a dicho dictamen y establezca un mes antes la fecha para la adopción de las posibilidades de pesca para el mar Mediterráneo. Esto contradice la esencia de que las decisiones de la CE están basadas en dictámenes científicos.
Por todo lo expuesto, desde el sector pesquero español hacemos un nuevo llamamiento a los miembros de la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo para que desde su responsabilidad política puedan impedir que la UE cometa un nuevo error en la aplicación de la política pesquera en el Mediterráneo. Es necesario y urgente que desde las instituciones europeas se envíen mensajes reales y positivos a los pescadores para que recobren la confianza en Europa. Es urgente iniciar los trabajos en la modificación del actual plan plurianual (MAP WestMed) para evitar el colapso de la actividad pesquera de bajura y, como consecuencia, el de las comunidades costeras, y, sobretodo, valorar el impacto socioeconómico que este plan ha tenido en sus primeros dos años de aplicación y hacer ver a la CE que el aspecto medioambiental no es el único que hay que tener en consideración, tal y como establece la propia PPC.